Refactorizar de forma inteligente hoy, avanzar más rápido mañana - Parte 1: Antes de tocar una línea de código
👀 ¿Realmente necesita hacer una refactorización?
A veces tenemos la tentación de refactorizar sólo porque el código “parece feo”, pero no siempre es una razón suficientemente buena. Una refactorización sólida empieza con una necesidad real y medible.
Estos son los signos de que una refactorización merece realmente la pena:
- ⚠️ Un cambio rompe partes no relacionadas - efecto mariposa en todas partes
- 🔁 Lógica duplicada por todas partes
- 🧩 El código es difícil de entender incluso para el autor original
- 🐌 Bajo rendimiento sin causa aparente
- ❌ Cobertura de pruebas baja o nula …haciendo que los cambios sean arriesgados..
- 🧱 Módulos estrechamente acoplados que impiden añadir nuevas funciones
- 🤯 Funciones enormes que hacen 10 cosas a la vez
👉 Cuando tu código empieza a ralentizarte, es una clara señal de que la deuda técnica te está pasando factura.
🎯 Definir un objetivo claro
La refactorización no es un objetivo en sí mismo. Pregúntese a sí mismo:
- ¿Lo hacemos para mejorar el rendimiento?
- ¿O para activar nuevas funciones?
- ¿Reducir errores?
- ¿Hacer el código más comprobable?
🔍 Elige uno o dos objetivos principales. Una refactorización sin un objetivo claro no es más que reescritura impulsiva.
📊 Haz una instantánea del “antes”
Antes de tocar nada, captura algunas métricas de referencia. Las necesitarás para demostrar que la refactorización ha merecido la pena. Por ejemplo:
- Tiempo de ejecución o tiempo de carga
- Porcentaje de cobertura de las pruebas
- Número de errores notificados
- Tiempo medio de desarrollo por función
- Indicadores de acoplamiento clase/servicio
💡 Incluso una simple tabla comparativa puede ser poderosa para demostrar la mejora post-refactorización.
🤝 Hable con la empresa
Técnicamente, el código puede gritar “¡Refactorízame!”, pero si las partes interesadas de la empresa no le ven valor, se encontrará con resistencia o presión para saltárselo.
Consejos para presentar el caso:
- Tradúzcalo en riesgo: “esto podría fallar en producción si…”
- Mostrar el impacto futuro: “cada nueva función aquí lleva un 30% más de tiempo”
- Venderlo como una inversión: “esto le llevará 1 semana y ahorrará 3 cada mes”
🚨 Si no puedes alinearte con los objetivos empresariales, quizá sea mejor posponerlo.
🧨 ¡Evalúa los riesgos!
No es seguro tocar todo el código. Algunos módulos gestionan pagos, envío de correos electrónicos, automatización, etc. Realice una pequeña auditoría interna de riesgos:
- ¿Existen pruebas que cubran este código?
- ¿Con qué frecuencia se utiliza?
- ¿Qué pasa si falla?
✍️ Documente los riesgos y decida si necesita un plan de restauración (banderas de características, conmutadores, retroceso manual, etc.).
🔒 No todo necesita refactorización
A veces es mejor dejar en paz el código feo pero estable que arriesgarse a romper algo que funciona bien.
✅ TL;DR - Su lista de comprobación previa al vuelo de Refactor
Antes de tocar cualquier código:
- Saber por qué está refactorizando
- Definir objetivos claros y mensurables
- Capture métricas iniciales
- Hable con las partes interesadas
- Comprenda el riesgos
- Esté preparado con un plan alternativo
📚 Índice de la serie - Refactorizar de forma inteligente hoy, avanzar más rápido mañana
Una guía práctica para refactorizar sin miedo: de la planificación a la validación.
1️⃣ Antes de tocar una línea de código
2️⃣ Planifique su refactorización paso a paso
3️⃣ Herramientas que le salvan de sí mismo
4️⃣ Refactorizar sin arrepentirse
5️⃣ Después de la refactorización: Cómo saber si ha funcionado
✨ Bonus: 4 lecciones para refactorizar de forma más inteligente